Como siempre Rinpoché estuvo maravilloso, y eso se notó la audiencia, que escuchaba con gran atención cada palabra.
Poder contar con Maestros como Rinpoché es una gran suerte, ya que transmite enseñanzas ancestrales, llenas de sabiduría, cuyo principal objetivo es alcanzar la felicidad. Y lo hace de un modo tan sencillo, tan natural que incluso quien nunca haya escuchada nada acerca de budismo puede comprender la esencia de esta filosofía.
Gracias Rinpoché.